En el fondo siempre me ha gustado depender de alguien, y nunca me he arrepentido. No quita que puede llevar una vida sin esa persona, pero siempre he tendido a depender de alguna persona en concreto durante algunos periodos. Tipo: el día se pasa más lento si no hablas con esa persona o una tarde se te convierte en un instante si la pasas a su lado.
No sé, nunca he sido un chaval de grises, siempre blanco o negro.
Y probablemente nunca vaya a cambiar, siempre buscaré a quien haga que una tarde parezca un invierno y que un día entero sea tan sólo un instante
viernes, 26 de julio de 2013
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario